miércoles, 3 de julio de 2013

Cliché

Te dejo ir, no para que vuelvas,
no para que me extrañes,
para que tomes al mundo
y lo hagas pedazos a tu gusto.

Te dejo ir para olvidarte,
miento, es para no hacerlo,
para jamás irme triste,
para acompañarte en el sofá.

Me avergüenza asfixiarte con lágrimas,
porque es tan sutil, pero cobarde.
Quiero llenar nuestra vida de aplausos,
por eso, te dejo ir. 

Necesito dejar de extrañarte,
no es justo tal masoquismo.
No más explosiones de ira por tu ausencia,
por momentos así, te dejo ir. 

Te dejo ir, no porque me rinda,
no para someterme a tus palabras.
Te dejo ir para volver a ser mía,
para no olvidar mi pasado. 

Te dejo ir, no para que me busques,
no para rogarte que vuelvas,
para hacerme a un lado y pases de frente
con los bolsillos repletos de horas tuyas. 

Amor, te dejo ir para ser libres, ambos.
Esta vez, me encojo de hombros,
aprieto los labios y te dejo ir,
aunque esté llena de miedo, cólera y celos. 

Voy a escribir el “para siempre”
porque se lo merece la promesa que te hice.
Me quedo a tu lado dejándote ir.
Y te dejo ir porque te amo, así como lo dicta el cliché.

...


miércoles, 3 de julio de 2013

Cliché

Te dejo ir, no para que vuelvas,
no para que me extrañes,
para que tomes al mundo
y lo hagas pedazos a tu gusto.

Te dejo ir para olvidarte,
miento, es para no hacerlo,
para jamás irme triste,
para acompañarte en el sofá.

Me avergüenza asfixiarte con lágrimas,
porque es tan sutil, pero cobarde.
Quiero llenar nuestra vida de aplausos,
por eso, te dejo ir. 

Necesito dejar de extrañarte,
no es justo tal masoquismo.
No más explosiones de ira por tu ausencia,
por momentos así, te dejo ir. 

Te dejo ir, no porque me rinda,
no para someterme a tus palabras.
Te dejo ir para volver a ser mía,
para no olvidar mi pasado. 

Te dejo ir, no para que me busques,
no para rogarte que vuelvas,
para hacerme a un lado y pases de frente
con los bolsillos repletos de horas tuyas. 

Amor, te dejo ir para ser libres, ambos.
Esta vez, me encojo de hombros,
aprieto los labios y te dejo ir,
aunque esté llena de miedo, cólera y celos. 

Voy a escribir el “para siempre”
porque se lo merece la promesa que te hice.
Me quedo a tu lado dejándote ir.
Y te dejo ir porque te amo, así como lo dicta el cliché.

...